O eso pensaba yo...
Las actividades estaban bien, eran divertidas. Pero había algo que no me hacía disfrutar de ellas al completo...
Y esa cosa es mi espalda.
A la señorita le ha parecido bien y bonito el darme por saco doliéndome cada dos horas fuera de casa como mínimo. Tal era el dolor que tenía que volverme de clase para casa porque no podía ni conmigo misma... ¡Y eso que ni siquiera llevé mochila!
Además de eso, he tenido un leve bajón de preocupación al conocer el resultado de mi análisis.
El caso resumido, ¡es que me han mandado de cabeza al hematólogo! Nada más y nada menos que el día 14 de Febrero...
Eso es una cita en toda regla y lo demás tontería. ¡Al menos voy a tener la primera cita de mi vida ese día! (?)
Así me lo imagino yo.
De momento dejo que mi madre me dé masajes de asesinato. Si no se me quita este dolor, pronto tendré que volver a visitar el centro de salud.
Me van a terminar conociendo más allí que en mi propia casa...
¡Nos leemos prontico! 8D
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