viernes, 4 de enero de 2013

¡Feliz 2013!


Un poquito tarde y con algo de retraso, ¡pero nunca importa!

Creo que ha sido el primer año que he empezado con buen pie. Siempre ha pasado algo la misma noche de las campanadas que me ha hecho pasar un mal inicio al año.

O casi siempre.

Ignorando unos dolores que aparecieron misteriosamente sobre mi costilla izquierda (y que han durado días...), el resto ha ido genial. ¡Y tan genial!

Si, he tardado un poquit- ...mucho, en subir esto, concretamente cuatro hermosos días. Pero hay que ser sinceros, entre el Internet tarumba que tengo y los preparativos de Reyes, más algunos muchos recados que he tenido que hacerle a mi madre enferma... Nada de nada.

Además, soy otra de las muchas personas que se ha unido al enemigo de los móviles de última generación, y entre estos días, he estado probando el cacharrito y su Internet free everywhere. Una delicia todo, y encantadísima estoy. (Me pienso las ganas de volver a Twitter con este aparatejo.)

Pero ese no es el tema. El tema de este blog son...


Si, conociéndome y los que me conocen, habrán previsto que yo con lo boba y mongola que soy, todos los años me pongo propósitos de año nuevo aunque luego los olvide.

Propósito número 1: ¡Voy a adelgazar!
Así que estaré en dieta permanente todo el año (con mis correspondientes caprichos de vez en cuando...). Y es que me encanta la comida, me encanta comer, disfruto un montón... Y hasta hace poco, me he dado cuenta de algo, y es que cuando como alguno de los magníficos platos de mi madre, como hasta inflarme. Si me he terminado el plato huyo a la cocina a seguir comiendo hasta que me lleno del todo. ¡No es normal! (Ni sano.)

Si, hasta inflarme, hasta que no puedo más, hasta que reviento. Es una buena cantidad de comida... Y eso durante este año se ha notado muy mucho.

Claro que, teniendo en cuenta que mi madre suele echar demasiada comida en un pequeño plato y a mi me han educado con la frasecita de "¡cómete todo lo del plato!"... Ahí tenemos los resultados.
Pero eso va a cambiar este año, vaya que si. Ya le he comentado a mi madre que no me llene el plato hasta el techo. Esperemos que se acuerde~.

Propósito número 2: ¡Aprenderé piano!
Es muy triste que después de haberme comprado un teclado matándome por ello para cumplir uno de mis sueños más lejanos... No haya aprendido nada de piano durante todos estos meses. 
Me avergüenzo y me deprime a la vez.

He tocado canciones, poquitas. Aun no domino el tocar a dos manos, y es algo que me gustaría cambiar. 
Así que este año voy a ponerme un horario para tocar ciertos días el piano hasta que se me caigan los dedos. ¡Lo prometo!

Propósito número 3: Aprender inglés.
Y mira que yo antes era un hacha con el inglés...

He olvidado casi todo lo que sabia en unos pocos años con mi ignorancia. Tengo unos tomos de un curso de inglés con DVD's esparcidos por mi triste habitación. Mi idea es ponerme horario también para estudiar este idioma poco a poco. Lo necesito y es útil, y si mi deseo es irme al extranjero es lo mínimo que debería hacer.

Propósito número 4: Mejorar en dibujo y aprovechar al máximo este curso.
Porque no le he sabido sacar provecho adecuadamente por algunos problemas de desorden, al menos los primeros meses de clase.
Me he esforzado mucho para entrar en un ciclo superior como Gráfica Publicitaria, formando parte de otro de mis sueños lejanos para que no sepa llevarlo adecuadamente... ¡Esto hay que arreglarlo!

Mejorar en dibujo es una meta constante todos los años de mi vida, por eso la he nombrado aunque incluida con lo de los estudios, ya que es algo que debería tener presente siempre al igual que el dibujo.

En cuanto a esto último, voy a ponerme un reto de hacer un dibujo mínimo al día y subirlo a dA, siguiendo los pasos de RoxyHana con este proyecto. ¡Me parece a mi que en vez de comenzar el día 1 de Enero lo haré el día 7! El siete es bonito y me encanta, así que me viene perfectísimo. 

Propósito número 5: ¡Cuidarme un poquito más!
Madrugar, darme el tiempo necesario para mi, tomarme las cosas con calma, ejercicio, las comidas correspondientes a su exacta hora...

Es algo que ignoro mucho cuando quiero castigarme a mi y a mi organismo cuando me arrepiento de algo o me encuentro mal. Cosa que voy a cambiar, porque luego pasa lo que pasa y me convierto en una pasa sin sentido e insana.

...Es un poco triste que tenga que pasar todo un año para sacar voluntad y proponerme sueños, ¿no? Pero mientras sea útil y lo que es más importante, que funcione, estará bien.

No espero que este año sea mejor que el anterior, no espero que todo me vaya bien a mi y a los de mi alrededor. Esperar es de vagos, sentado no se consigue nada. ¡Por eso no lo espero, voy a hacer que este año sea ideal y que todo mejore gradualmente, pienso esforzarme!

Nos vemos próximamente~ ¡Gracias por leer!


No hay comentarios:

Publicar un comentario